
Que nos da Dios de comer y de beber.
Dijo el Señor a Ezequiel:
"abre tu boca, y come lo que yo te doy"... Ez. 2:8
Si Dios es Espíritu, su alimento es espiritual. ¿Cómo? a través de Su Palabra que nos edifica y fortalece, es el alimento que sacia nuestra alma en todo momento, que nos levanta cuando nos encontramos en tribulaciones, que nos orienta, que nos guía. En su palabra Dios habla a cada uno de nosotros cara a cara. Ezequiel se comió aquel rollo del libro que se encontraba escrito por delante y por detrás, dónde estaban escritas en él endechas, lamentaciones y ayes....
"y fue en mi boca dulce como la miel"
Así es la palabra del Señor para todo aquel que se entrega a Él, por más amarga que sea la situación que estemos enfrentando, en Su Palabra siempre lo encontraremos con una respuesta para salir y seguir adelante.
También dijo Él Señor a Ezequiel: Alimenta tu vientre y llena tus entrañas de este rollo que yo te doy... ¿por qué lo mando a "llenar su vientre"?, porque solo llenos de Su Palabra y de Su Espíritu, resistiremos ante las tribulaciones y tentaciones. Que grandioso es Dios: Ezq. 3:2-4
Una colaboración de
Ana Carolina González
No hay comentarios.:
Publicar un comentario